Acéptalo de una vez... Las cosas no salen siempre como nosotros queremos. El desarrollo de la vida tiene sus propias reglas y una de ellas afirma que no siempre podemos ganar. A veces las situaciones cambian y nada es como esperábamos, pero no importa. Tenemos que aguantar, mantenernos en pie en los duros momentos y pensar en los buenos que tarde o temprano llegarán.
Al igual que
la vida nos impide el triunfo eterno también mantiene la misma regla para la
derrota. Nuestras vidas son muy largas y en ellas hay lugar
para todo. Cierto que todos preferimos triunfar y que todo nos salga a pedir de
boca, pero no es posible. Lo importante es vivir cada momento como si fuera
el último.